Como si fuese una falla informática masiva, de pronto el funcionamiento global se entorpece, sin que podamos comprender a tiempo sus consecuencias.Tres cuerpos expuestos al virus del capitalismo,a la existencia frenética y hacinada, a perseguir un estatus y al miedo a lo impredecible.
De pronto, ante la expansión del virus, cada cuerpo se encierra hasta lo insostenible, seenfrenta a sus propios temores y ansiedades sin respiro, ni pronta salida.
¿Qué sucede entonces con todos esos movimientos restringidos? ¿Cuánto más puede soportar un cuerpo? ¿La salida se encuentra en profundizar en la soledad, el aislamiento y el
individualismo? ¿Qué actitud adoptar frente al control? ¿Hacer caso omiso? ¿Obedecer al pie de la norma, o resistir en grupo?
La siguiente pieza se alimenta de la fractura inesperada de la humanidad, del control sanitario y su normalidad. Se inspira en la situación contemporánea, en la vivencia personal y sus formas
de sentir.